Hace unos meses mi profesora de
inglés me volvió a pedir lo que ella y yo llamamos “cake and English exchange”, es decir
que yo le hago una tarta y ella me da a cambio unas clases particulares de
inglés. En esta ocasión su hijo pequeño cumplía 4 años y quería una tarta de
Toy Story.
Lo primero que hice fue
inspirarme viendo imágenes de otras tartas en internet, no para copiarlas sino para activar mi imaginación (a veces en vez de esto veo la película). Cuando se empieza un proceso creativo en ocasiones necesitas de un estimulo, un empujoncito que hace que tu mente empiece a engendrar ideas estupendas. Después ya no puedes parar e incluso sueñas con ellas....esto me pasaba cuando diseñaba edificios como arquitecto, y lo mismo me ocurre ahora cuando tengo que crear tartas.
Lo bonito de este "proceso creativo" es que está siempre vivo y que hasta que no pones la última decoración sobre la tarta (que suele ser la figurita) la idea que tienes de la misma no deja de cambiar y evolucionar. Muchas veces me hago un croquis inicial, para organizarme, con como quiero que sea la tarta y al final no se parece en nada. Otras sin embargo tengo que ajustarme a una idea mas estricta, las tartas quedan igual de bonitas pero el proceso es menos interesante y divertido.
Por eso agradezco los encargos como este en los que te proporcionan un tema pero te dan total libertad para realizarlo. En este caso, la única limitación era el número de raciones, que tenía que ser 25, el resto dependía de mi imaginación.
Asi que realicé un bizcocho de
chocolate relleno y recubierto de ganaché de chocolate con la ayuda de un molde
de 22cm de latón que compré en el chino, y que he de reconocer que es
estupendo, mejor incluso que algunos que he comprado en tiendas especializadas.
Para decorarla opté por centrarme
en el personaje del vaquero Woody, mi favorito, pero sin dejar de
remarcar la bonita amistad de los muñecos con una imagen de ambos, en papel
comestible, sobre la tarta. El lazo trenzado del borde lo hice con la
ayuda de una extrusora.
Como no quería hacer un modelado
complejo y realista del personaje, decidí basarme en una imagen de Andreia Akita para conseguir un muñeco sencillo pero efectista de Woody en solo hora y
media.
Lo que mas tiempo me llevó fue
crear un cartel, semejante al de la película, donde se leyese “Aaron is 4”.
Aunque para conseguir las letras amarillas me ayudé de unos cortadores, el
resto lo recorte a mano. Es decir, que pegué las letras sobre fondant azul y
luego, con la ayuda de un cutter, fui recortando el perímetro dejando unos milímetros
de equidistancia…una pequeña paliza!
Como anécdota curiosa comentaros
que unos días antes del cumpleaños, Aaron le pidió a su madre que su tarta
fuese de la película de Disney Cars, estropeándole así la sorpresa de la de Toy
Story. Como ella quería hacerle feliz decidió que la tarta fuese para la fiesta
infantil y me pidió unas pocas galletas de Cars para la celebración en familia.
A pesar de disponer de poco
tiempo (esa semana tuve que hacer 4
tartas y 52 galletas) pude encontrar un hueco para hacer unas galletas
sencillas y vistosas decoradas con papel comestible.
A pesar de que con las prisas no
quedaron muy rectas y me hubiese encantado repetirlas, de haber tenido tiempo, lo
importante es que Aaron pudo disfrutarlas en su cumple y que le encantó ver sus
personajes favoritos sobre ellas.
Luz Ignesón
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© [2013-2015] [Be brown, be sweet]
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Me encanta el lazo que rodea a la tarta y la figura ha quedado genial!
ResponderEliminarMuchas gracias, es una tarta sencilla pero muy bonita. En Facebook gustó mucho
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