viernes, 30 de septiembre de 2016

Tarta Yoda (comienza la nueva etapa de Star Wars)

Esta es una de esas tartas que surgen a raíz de otras y por eso hacen el doble de ilusión ya que, no solo han valorado el trabajo que has realizado (que aunque sea regalado no deja de ser trabajo), sino que además les ha gustado el sabor de la tarta, que al fin y al cabo es lo mas importante en la repostería.


Y por eso cuando la madre de Rodrigo se acercó, en la “fiesta” de cumpleaños de mi hermana, y me dijo que tras ver la tarta que le había regalado había pensado que sería fantástico que le pudiese hacer una de Star Wars a su hijo, me llenó de satisfacción.


Lo malo fue que, como era algo no planeado, la necesitaba para dos días mas tarde y yo estaba bastante liada con mi trabajo como arquitecto. Así que acordé con ella que sería una tarta muy sencilla, pero que no iba a dejar indiferente a su hijo.


Para decorarla decidí hacer a Yoda, uno de mis personajes favoritos, solo que en vez de basarme en el de las películas de mi niñez, utilicé como inspiración el dibujo de la serie de animación de Disney, que era mas asequible.


Si veis tutoriales de este personaje en Internet en casi todos parece que están modelando una rana hasta que le ponen las orejas, la capa y el bastón. Y supongo que, al fin y al cabo, es la mejor forma de afrontar esta figura.


Desgraciadamente no acabó de convencerme el resultado final de mi muñeco, ya que le faltan arrugas, muchas arrugas. Para mi Yoda siempre será el Maestro Jedi viejo y con pelos de loco, que vivía en el asqueroso planeta Dagobah y no el joven y ágil espadachín de la nueva trilogía y de la serie de animación en el que me basé.


Pero dejando a un lado las ralladuras de mi yo friki, la tarta quedó muy bien.

Decidí forrarla con un azul marmolado para simular la Galaxia. Para ello mezclé fondant azul oscuro con un poco de fondant negro, pero sin llegar a amasarlo demasiado para que los colores no se fundieran. Luego le puse muchas estrellitas amarillas (para mí el logo de Star Wars siempre será dorado, aunque hace años que cambió su color al plata) a juego con el nombre del cumpleañero que recorté a mano con la tipografía de las películas. Por si queréis hacer algo similar, os cuento que lo que hice fue descargarme una fuente de Internet, escribir con ella en photoshop, imprimirla y recortarla a mano. De las múltiples tipografías que hay en la red yo cogí la que se llamaba "StarJedi Special Edition", que, desde mi punto de vista, es la que más se parece a la de la saga.

El efecto marmolado no se aprecia bien en las fotos

Ya solo queda contaros que, cuando fui a entregarla, el pequeño Rodrigo se puso a dar botes como loco con una máscara de R2D2 intentando ver el interior de la caja mientras su madre trataba de esconderla diciéndole que era una sorpresa. En un descuido consiguió levantar un poco la tapa y salió a la carrera emocionado porque era una tarta de Star Wars y era toda suya…..¡Qué más podía pedir este pequeño fan de las saga más legendaria del cine fantástico!

   Luz Ignesón

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2 comentarios:

  1. Molado me ha el maestro Yoda. Si la ves publicada 2 veces es pq yo no veo la primera por ningun lado. Muac

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