jueves, 23 de enero de 2014

Galletas bicolor (¡¡Chanel al poder!!)

Como la experiencia del fondant me había entusiasmado (hay que limpiar menos cacharros que si hago buttercream) me acerqué a la tienda americana a por mas material y salí arruinada pero con fondant de todos los colores imaginables. También aproveché para comprarme mis primeros moldes de tartas y cortadores de galletas y así devolverle a mí cuñada los suyos (si lo estás leyendo gracias por ayudarme a empezar :) ).

Entre las cosas que me compré había un set de 3 cortadores de flores tipo Ágata Ruiz de la Prada y una cajita con formas básicas (corazón, estrella, luna…) Así que en cuanto llegó el fin de semana volví a repetir la receta de las galletas, esta vez con menos ayuda, y a hornearlas en el día (porque soy una “caga prisas” y lo de hacer la repostería en dos días todavía me cuesta).


Como veis me volvieron a quedar bastante gorditas

Luego amasé el fondant, éste era de la marca PMC y estaba mas duro que el que había probado del Dr. Oetker pero una vez amasado lo encontré más maleable….aparte de la fantástica ventaja de que tuviese ya el color que quería (ver nota abajo)

Para las formas básicas opté por decorarlas usando un color de base y luego utilizar los lápices pasteleros para delinear concéntricamente la forma (he de reconocer que la estrella quedó un poco grimosa). Como los colores que vienen en el paquete son los primarios, la combinación posible es mucho más limitada que si hubiese utilizado glasa o buttercream pero para empezar a hacer galletas y coger práctica creo que son perfectos y muy cómodos.

Tengo que mejorar con la fotografía culinaria, lo se!

Para las flores jugué con dos colores de fondant y los diferentes tamaños de los cortadores creando cuatro tipos de galletas que en el conjunto del plato quedaban muy bien. El cortador pequeño me dio bastantes problemas para extraer de él el fondant y por eso en algunas galletas probé a hacer un punto con la boquilla 8 a modo de cortador.




El conjunto fueron unas galletas muy sabrosas y muy bonitas, o eso me pareció por aquel entonces cuando no quemar la masa era todo un logro.
Nota: Para teñir fondant blanco no lo hagáis nunca cogiendo todo el taco, pues tardareis una eternidad en conseguir el color deseado. Es mejor coger una bola tamaño pelota de ping-pong e ir subiéndole el color. Una vez conseguido lo mezclaremos poco a poco con el resto del fondant amasando pacientemente cada nueva incorporación, antes de meter la siguiente, hasta que sea completamente uniforme. Obviamente cuando terminemos el color habrá aclarado y tendremos que poner un poco mas de colorante para dejarlo perfecto, pero el proceso en total será cien mil veces mas rápido que si lo intentásemos desde el principio con todo el fondant. Os lo aseguro.
Otra cosa importante a tener en cuenta es que seguramente acabareis con los dedos del color de colorante y que, por mucho que os lavéis, esas manchas permanecerán varias horas en vuestras manos y, lo que es peor, entre vuestras uñas!!!

   Luz Ignesón


Si te ha gustado esta entrada puedes dejarme tu comentario más abajo, será bien recibido :)
Si quieres recibir todas las actualizaciones del blog por e-mail solo tienes que escribir tu dirección de correo electrónico en la pestaña de la columna derecha donde pone suscripción (no hacen falta mas datos).

© [2013-2014] [Be brown, be sweet]

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Gracias por dejar un comentario, prometo leerlo y contestarlo lo antes posible.

Si no consigues que se publique lo que has escrito, házmelo saber mandándome un mensaje (pestaña de la derecha). El formulario de comentarios a veces da problemas y no quiero dejar de leer tu opinión.